Araceli Salas es psicomotricista y educadora infantil y ha sido la precursora de la primera ley básica educativa relacionada con el alumnado con dificultades específicas de aprendizaje. También, asesora en dislexia y otras dificultades de aprendizaje a familias, profesionales y a instituciones públicas y privadas.

  1.     ¿Cuál es la razón y de qué forma surge Disfam?

La razón fue el encontrarme sola ante las dificultades y el diagnóstico de mi segundo hijo. Como familia sufrimos mucha incomprensión y tuvimos que dar muchas vueltas hasta conseguir el diagnóstico. Una vez tuvimos el diagnóstico descubrimos que no existía ninguna ley educativa que ampararse a niños con Trastorno de Aprendizaje… ese fue nuestro verdadero motor, trabajar por los derechos que mi hijo tenía y que ninguna familia, tuviera que pasar por lo mismo.

 

  1. ¿Cuál es el principal factor que te entusiasma a seguir con este gran proyecto?

La gran necesidad que tienen estos niños y niñas de poder aprender según sus potenciales y el que no tengan que sufrir a diario al ir al colegio.

 

3.¿Notas que ha habido un cambio en los colegios, sistemas educativos y en la sociedad con respecto a la dislexia?

Si, creo que de cada vez más existen profesionales sensibilizados y que la sociedad poco a poco va despertando y siendo consciente de este problema. El sistema educativo es otro tema.

 

  1. Durante este año ¿cuál ha sido el acontecer para ti más memorable frente a la dislexia?

Este año resaltaría la gran labor que se ha llevado a cabo en Argentina y la gran recompensa de poder alcanzar una Ley Nacional de Dislexia, que por primera vez ampara a este tipo de alumnado.

 

  1. ¿Qué crees que es fundamental proponer y hacer a nivel educación para que esto deje de ser un trastorno oculto?

Es necesario que exista esta asignatura (Dificultades Específicas de Aprendizaje) en los planes de formación en las Universidades. De esta forma los futuros maestros y profesores sabrían muy bien que hacer y qué no hacer en el aula. También es esencial que se haga cumplir la ley que en estos momentos ya existe, para que este tipo de alumnado pueda aprender en igualdad de condiciones. Tampoco podemos olvidar lo necesario de seguir incidiendo en los cursos de formación, cualquier docente tendría que estar formado en la materia. Y por último y no por ello lo menos importante, campaña de sensibilización dirigida a toda la sociedad.